Retablo Pintoresco de Chile: Identidad de Chile, parte 1

Por Eugenio Bastías Cantuarias, investigador de la cultura folclórica.

La loca geografía de Chile es una gran determinante del carácter de su habitante, sus vestimentas, sus ciclos de trabajo, que coinciden con los ciclos de la naturaleza, los productos de la tierra que mezcla en su condimentada sabiduría culinaria. Parafraseando al gran investigador y folclorólogo Oreste Plath, diremos que el folclore de Chile es una baraja y sus habitantes son sus cartas, las que poseen una enorme multiplicidad de colores, formas y “pintas”.

La voz interpreta el entorno, los instrumentos que acompañan a la voz reciben su materialidad de manos de la naturaleza: la madera, los metales, los encordados, las pieles para ser percutidas y otros; las leyendas y las supersticiones, así como los refranes y sentencias, reflejan la acumulación de cierta clase de conocimiento empírico. Los oficios son generados por alguna necesidad, empleos que a su vez dan origen a una nomenclatura, reglas de comportamiento, modos de vivir y de razonar frente a lo conocido y lo desconocido. El ser humano, siendo analizado a través del cristal del folclore como disciplina, es el estudio de la representación del medio cultural, natural y sobrenatural, que una unidad social o grupo humano realiza por medio de la construcción de un cúmulo de objetos, acciones, pensamientos y sentimientos humanizadores, personificando el “más acá” y el “más allá”, haciendo que ambos ámbitos se integren en un solo gran mundo, en un todo integral que es más que lo tangible, y un poco más intangible que la más elaborada de nuestras ciencias actuales. Es la misma voz que interpreta el canto a lo divino en el templo y que luego desciende a cantar lo humano.

Es así como, debido a lo transdisciplinario de la sabiduría popular, es necesario asimilar con mucho cuidado la gran variabilidad de las expresiones del folclore, en cada época y en cada lugar. Dicho cuidado no debe transformarse en obsesión purista, pero tampoco debe reflejar una falta de contexto tal que la expresión, además de perder su entorno cotidiano de realización, se le despoje de su significación.

Conceptos en torno al Folclore

El concepto de folclore emana de la percepción e interpretación de la realidad: de la cultura folclórica o también llamada folclore – vida. Este tipo especial de cultura se compone de conductas habituales que manifiestan personas de todos los grupos humanos, conductas muy propias de ellos, las que no están destinadas a la exhibición pública, sino que existen para satisfacer sus necesidades espirituales y materiales en su ambiente, siguiendo tradiciones muy representativas de su identidad.

En la cultura folclórica confluyen siete tendencias o aspectos de interés en ella:

– Investigación.
– Docencia.
– Proyección.
– Aplicación.
– Intervención.
– Conservación.
– Preservación.

• INVESTIGACIÓN
Es la ciencia del folclore; sus principios, métodos y objetivos se aproximan a la Antropología Cultural. Busca observar, describir, analizar, clasificar y sistematizar un hecho u objeto folklórico con el apoyo de bibliografía pertinente, situando su explicación en el ámbito de una teoría de la cultura, basada en una o más hipótesis.

• DOCENCIA
Se realiza a nivel universitario, aunque en Chile no hay carreras de esta especialidad.

• PROYECCIÓN
Se circunscribe a la difusión, muestra, exposición de expresiones folclóricas, generalmente coreográficas y musicales, por parte de una o más personas, las cuales imitan la cultura folclórica para presentarla en un espectáculo de representación artística. Esto da origen a los conceptos de cultor e intérprete. El primero vive el folclore como un elemento de su tradición cultural, de su realidad; el segundo lo utiliza como instrumento de realización a nivel anímico o laboral.

• APLICACIÓN
Se confunde con la anterior, sin embargo, la aplicación consiste en poner el folclore al servicio de diversos objetivos, como el mejoramiento económico a través del apoyo a las artesanías rurales, la promoción del turismo, el éxito del quehacer pedagógico, la activación de la creatividad artística y otros.

INTERVENCIÓN
Es la presencia de investigadores en grupos humanos para reactualizar o fortalecer, o debilitar, o eliminar alguna manifestación de esa cultura. Es también llamada manipulación. Esta acción interventora podría justificarse en acciones destinadas a la eliminación de un hábito folclórico dañino para las personas o el medio natural. A su vez, también podría ser válida una intervención durante la ejecución de un proyecto que busque la recuperación de una costumbre que hubiese perdido su vigencia. Pero esto debería hacerse con un sólido manejo de antecedentes, con un prolijo estudio de las presuntas e imprevisibles consecuencias de dicha intervención.

CONSERVACIÓN
Se obtiene primordialmente mediante archivos, bibliotecas y museos. Estos guardan colecciones de manuscritos, impresos, cintas magnéticas, fotografías, películas, videos y objetos, los que constituyen tanto testimonios histórico–culturales, como elementos de investigación.

PRESERVACIÓN
Su objetivo es cuidar la práctica de los bienes culturales folclóricos vigentes, defenderlos de la arremetida de la cultura universalista comercializadora que agrede a las culturas locales. Se diferencia de la conservación, en que ésta busca reunir y salvar de la destrucción y del olvido los bienes culturales folclóricos. También se distingue de la intervención en que no diseña ni ejecuta tareas de estímulo o desincentivo de comportamientos culturales, sino que de una manera amplia y constante evita, disminuye o elimina obstáculos contra el folclore–vida y las actividades que de él se desprenden. Ejemplo de estas líneas de acción es la accesibilidad a las materias primas por parte de los artesanos, o que no se interrumpa en las universidades la investigación y la docencia de la cultura folclórica, o que los medios de comunicación dispongan de espacio suficiente para su correcta difusión.

(Continuará)

Fuente:
Bastías Cantuarias, Eugenio. Chiliche, un retablo pintoresco de Chile. (Resumen de la obra del profesor Manuel Dannemann, Enciclopedia del folclore de Chile, Santiago: Universitaria, 1998). Documento de trabajo del Ballet Folklórico Antumapu de la U. de Chile, septiembre de 2000. Inédito.